Corea del Norte intensifica las penas de muerte por ver películas extranjeras, alerta la ONU
Un informe del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos detalla que el régimen de Kim Jong-un utiliza fusilamientos públicos, trabajos forzados y hambre como herramientas de control, mientras restringe cada vez más el acceso a información externa.
Corea del Norte aplica con mayor frecuencia la pena de muerte contra ciudadanos sorprendidos viendo o compartiendo películas y series extranjeras, según un informe presentado por Naciones Unidas.
El documento, basado en más de 300 entrevistas con fugitivos, advierte que en la última década el régimen de Kim Jong-un ha profundizado el control sobre todos los aspectos de la vida cotidiana.
Los testimonios describen ejecuciones públicas mediante fusilamiento, realizadas para infundir miedo en la población. Desde 2015, al menos seis nuevas leyes ampliaron la posibilidad de aplicar la pena capital, incluyendo delitos vinculados al consumo de medios extranjeros. “Más miedo” es la expresión que repiten los desertores, quienes aseguran que incluso jóvenes han sido condenados a muerte por tener contenido surcoreano.
El informe revela también un incremento del trabajo forzoso: miles de personas, en especial de familias pobres, son reclutadas en “brigadas de choque” para proyectos de construcción o minería, en condiciones peligrosas y con muertes frecuentes que el Estado glorifica como sacrificio al líder. Incluso huérfanos y niños de la calle han sido enviados a estas labores.
La vida diaria se ha degradado de forma dramática desde que Kim abandonó la diplomacia con Occidente en 2019. La población sufre hambre crónica y la pandemia agravó la escasez de alimentos, mientras el gobierno restringió los mercados informales y reforzó la orden de disparar contra quienes intenten huir por la frontera con China.
La ONU denuncia que al menos cuatro campos de prisioneros políticos siguen activos, con detenciones de por vida, torturas y muertes por desnutrición o exceso de trabajo. El Alto Comisionado Volker Türk llamó a enviar la situación a la Corte Penal Internacional, aunque reconoce que Rusia y China bloquean sanciones y medidas en el Consejo de Seguridad.
La imagen reciente de Kim Jong-un junto a Vladimir Putin y Xi Jinping en un desfile en Pekín simboliza la alianza que protege al régimen. Entretanto, los testimonios recogidos muestran que los jóvenes norcoreanos mantienen un deseo de cambio que la represión aún no logra sofocar.